Un matrimonio siempre es motivo de alegría. Desde tiempos ancestrales es un día festivo que los novios, sus padres, familiares y amigos convierten en un acontecimiento inolvidable. Escoger bien el lugar de la celebración, las fotos, el ramo, el ambiente o el menú… Hay multitud de detalles a tener en cuenta, y el traje de novio es uno de los más importantes. Debe estar en consonancia con el estilo de boda que se pretende, el lugar donde se celebra y con la época del año. No es lo mismo una boda civil que una religiosa, casarse en la ciudad o en el campo. Y es bueno saber que existen ciertas reglas que conviene seguir. Es el novio quien marca el protocolo.

La decisión del novio marca al resto de invitados

Es el novio quien, al escoger el tipo de prenda que va a llevar, va a marcar el protocolo de la boda y por tanto como deberían vestir los padres de los contrayentes y el resto de invitados. Aunque actualmente ya no se suele imponer a los invitados la etiqueta de un modo riguroso, sí es conveniente que se indique en la invitación a modo de guía. Es importante que la sigan los padres de los novios, los testigos y los asistentes más allegados.

Por tanto es aconsejable en la invitación indicar “Traje oscuro”, “Chaqué” o “Etiqueta”. También se puede optar por fórmulas flexibles al estilo  “Chaqué o traje”, o bien, “Etiqueta o traje oscuro”.

El novio también puede optar por vestir de chaqué y en la invitación mencionar únicamente traje oscuro. De este modo, se evita comprometer al resto de invitados. Basta con informar sólo a los más allegados de que preferiblemente lleven chaqué también.

El novio escogerá su atuendo en función del estilo de la boda, si es formal o informal, religiosa o civil, en la ciudad, en el campo o incluso a pie de playa, en un lugar abierto o cerrado.

La distinción del chaqué

Nace en Inglaterra en el XVII y su nombre proviene del francés jaquette. Al principio, se confeccionaba en colores variados y se llevaba con bordados. A mediados del XIX, fruto del puritanismo inglés bajo el reinado de la reina Victoria, aparece en su forma actual más sobria. La versión inglesa, la más utilizada internacionalmente, exige que la chaqueta sea en negro. Sin embargo, en la francesa, la chaqueta es en color gris marengo. Si en una boda quieren llevarse las dos versiones, es conveniente que el novio y el padre de la novia lleven el gris marengo dejando el negro para el resto de asistentes.

En ambas versiones el chaleco, indispensable en el chaqué de novio, puede ser recto o cruzado, gris perla, beige o crudo, aunque puede optarse por versiones más atrevidas en tonos pastel. En el chaqué negro puede llevarse también un chaleco del mismo género con un ribete de piqué blanco, aunque debiera reservarse para ceremonias solemnes. Conviene ser evitado por tanto en bodas, en especial por parte del novio.

En los meses de verano y en bodas con fiestas al aire libre o en carpas, el chaleco puede ser de lino. En este caso será beige, crudo o bien de algún tono pastel, opción sin duda más sugerente pero igualmente elegante. El pantalón del chaqué debe ser de rayas, aunque en adolescentes es más correcto usar una franela gris medio.

La camisa debe ser blanca, de cuello normal y puño doble de gemelo acompañándose de corbata y siempre con tirantes. Por lo tanto, prescindiremos del cinturón. Los zapatos serán únicamente negros y de cordones, preferentemente oxford antes que derby. El modelo Oxford es el más elegante y se caracteriza por cerrar a la perfección cuando está abrochado, de forma que sólo se ve la parte superior de la lengüeta. Sin embargo, en el modelo Derby, las dos cañetas se abrochan dejando una distancia entre ambas por donde se ve la lengüeta. A pesar de ello, es más cómodo para quien tenga un empeine alto.

Si queremos ser ortodoxos el chaqué es una prenda que debe utilizarse en ceremonias que tengan lugar por la mañana. Sin embargo, su uso social se ha extendido, siendo perfectamente aceptable usarla por la tarde. Existe otra versión donde las tres piezas están realizadas en gris medio pero debe usarse exclusivamente por la mañana. Si el novio quisiera usar el chaqué en la ceremonia de su boda, es aconsejable que los invitados más allegados, en especial los padres de los contrayentes y testigos, también lo lleven. Los demás invitados pueden igualmente usarlo o llevar un traje oscuro.

Máxima etiqueta: el frac

El frac es el traje masculino de máxima etiqueta y quizás el más elegante. Al igual que el chaqué, adopta su forma y color negro definitivo a mediados del S. XIX en Inglaterra. Se debe usar cuando el protocolo lo requiera. En la invitación constará rigurosa etiqueta, frac o white tie.

En Catalunya, al igual que en otras partes de Europa, existe una larga tradición de utilizarlo en bodas. Deberá ser una ceremonia de tarde/noche, preferentemente en la ciudad y en un local cerrado, es decir que no sea al aire libre o en una carpa. Es aconsejable que los padres de los novios vayan igualmente de frac, mientras que el resto de invitados puede ir de frac, esmoquin o de traje oscuro. En una misma ceremonia nunca se mezclarán chaqués y fracs.

El frac se lleva con chaleco y pajarita de piqué blanco. La camisa será blanca con pechera de piqué y botonadura especial, puño de gemelo y cuello de aleta. Se lleva igualmente con tirantes y los zapatos serán negros de cordones modelo oxford. Pueden llevarse escarpines de charol, pero su uso ha decaído. En actos académicos el chaleco debe ser negro al igual que el lazo.

El smoking, vestidos para la fiesta

Es la prenda apropiada para fiestas y celebraciones de noche. En la invitación constará smoking, etiqueta o black tie. Aparece en 1886 en el club del Tuxedo Park de Nueva York vestido por el dandy Griswold Lorillard, Grizzy.

Lo llaman  tuxedo y los ingleses dinner jacket.
La forma original era con solapas en punta y en los años mil novecientos treinta apareció la versión de solapa chal. No necesita chaleco si es cruzado, pero si es recto debe llevarse con faja o con chaleco, que puede ser del mismo tejido que la chaqueta o de fantasía. La faja debe llevarse siempre con los pliegues hacia arriba. Lazo y faja deben ser negros y si son de otro color, ambos deben ser iguales.

Se viste con camisa blanca de puño doble de gemelo, con botonadura especial, con cuello de aleta o normal. Normalmente el esmoquin se realiza en negro aunque puede hacerse en azul noche. El primer smoking azul noche fue llevado en los años 1920 por el entonces futuro duque de Windsor. Como él mismo lo definió, con la luz artificial resulta más negro que el propio negro. El esmoquin de chaqueta blanca queda reservado para fiestas de verano al aire libre o para cruceros. Si la boda es religiosa, el novio nunca debe vestir de esmoquin, aunque es aceptable que lo hagan los invitados.

Otra opción elegante: el traje

Aunque el traje no es una prenda de etiqueta propiamente dicha, es una opción perfectamente válida para una boda, tanto para el novio como para los invitados. En bodas de mañana el traje indicado es el azul marino y el gris marengo, tanto liso como de raya diplomática fina.

Para bodas de tarde, lo más adecuado es el traje azul marino, gris marengo o negro, preferentemente de estambre liso o lana fría en verano. Es conveniente que en bodas de tarde el novio evite los trajes de rayas. La camisa más adecuada siempre es la blanca con puño doble de gemelo. En todos los casos, el traje debe acompañarse de zapatos negros de hebilla o de cordones, que pueden ser modelo oxford o derby. Los calcetines deben ser negros o del mismo color que el traje, aunque de un tono más oscuro.

Para bodas de tarde, lo más adecuado es el traje azul marino, gris marengo o negro, preferentemente de estambre liso o lana fría en verano.

Fuera de los meses de pleno verano, el traje puede llevarse con chaleco, convirtiéndolo así en más elegante. El chaleco puede ser tanto recto como cruzado si se busca una mayor sofisticación. Deberá ser del mismo tejido que el traje, aunque se puede elegir de color gris perla o beige en el caso de que el traje sea liso. Estas últimas opciones sólo deben ser utilizadas por el novio.

Conclusiones para un gran día

El novio es quien marca el protocolo de la etiqueta en una boda. El traje es una opción totalmente válida. Si se opta por una prenda de etiqueta, la mejor opción es el chaqué en bodas religiosas y el smoking en las civiles.

Imprescindible para el novio: camisa blanca de puño doble con gemelos, corbata y zapatos negros de cordones (pueden ser de hebilla si se lleva traje).

Sobre los padres y los testigos: es conveniente que vayan como vista el novio, pero no más formal que él.

Si la boda es religiosa, el novio nunca debe vestir de esmoquin, pero sí es aceptable que lo haga el resto de invitados. En este caso, se debe indicar en la invitación “etiqueta”.