Fuente Imagen Portada: Web Dorothee Schumacher
Hablar de Dorothee Schumacher es hacerlo de sofisticación, elegancia y lujo. A través de unos códigos marcados, la firma alemana ofrece piezas imprescindibles para construir un fondo armario pensado para durar en el tiempo. En las siguientes líneas te presentamos el origen de la marca que define las claves del minimalismo de lujo.
Durante las últimas temporadas las líneas minimalistas de los 90 han vuelto a dominar las tendencias. Los principales referentes de estilo encuentran en firmas como Dorothee Schumacher prendas que juegan con las siluetas más simples pero elegantes, un exquisito juego con el color, las texturas y la apuesta por piezas atemporales para conseguir looks cómodos pero sin renunciar al estilo. Y es precisamente esta visión la que encontramos en el núcleo de la firma.
Desde sus inicios Dorothee Schumacher presenta una particular visión de la moda centrada en el color, la elegancia y la sofisticación femenina. Todo comenzó en 1989 cuando la joven diseñadora, nacida en Dusseldorf y criada en el campo alemán, decidió fundar su firma presentando una línea de camisetas. Tras haber trabajado con un fabricante italiano de prendas de punto y varias estancias en Francia, emprendió su propio camino.
En solo tres años la firma amplió su oferta con una línea de prendas de punto y abrió sus primeros espacios físicos en Dusseldorf, París y Milán. A medida que la diseñadora fue construyendo su espacio en la industria de la moda, la firma se iba expandiendo. Ya con una década de actividad, Schumacher constituyó su sede en el puerto industrial de Manheim, transformando una antigua fábrica de cartón en un impresionante loft de dos plantas.
El universo de Schumacher se basa en potenciar el carácter femenino. Cada colección promueve un estilo de vida contemporáneo, combinando la elegancia con toques informales y deportivos para estilismos de diario. En sus propuestas podrás encontrar desde jersey de punto, pantalones con estampados de cuadros o abrigos de lana cruzados para ir a la oficina hasta prendas que incluyen transparencias, tejidos satinados y bordados para una velada formal. Cada una de estas opciones refuerza la visión de la firma, permitiendo a cada mujer expresar su propia personalidad a través de la moda.
En sus más de tres décadas de experiencia, Schumacher ha experimentado con la misma fórmula con el objetivo de aportar claves para construir un fondo de armario con prendas cómodas, atemporales y adaptadas al estilo de cada época.
Actualmente podrás encontrar desde la línea de prêt-à-porter hasta calzado y accesorios para todo tipo de mujeres a nivel mundial. Y es que, en los últimos años, la firma alemana ha experimentado un gran salto internacional. Además de la gestión de 10 tiendas independientes, Dorothee Schumacher está presente en más de 40 países y recientemente ha posicionado los Estados Unidos como su segundo mercado más fuerte.
Por Ferran Farled