John Lobb ha sido y es el artesano por excelencia del calzado masculino a medida. La historia de su fundador, un granjero de Cornualles, no deja de sorprender. A finales del siglo XIX llegó a Londres y se convirtió, en poco tiempo, en el artesano-zapatero más famoso de la ciudad. El Príncipe de Gales y después Eduardo VIII, no dudaron en acudir a su taller y confiar en su “savoir faire”. Desde entonces, cobró fama a nivel internacional y cuidó los pies de hombres de negocios, políticos, reyes, príncipes, maharajás, aristócratas e incluso gente del séptimo arte como Hitchcock.

La marca, perteneciente al grupo Hermès, continua siendo hoy en día sinónimo de elegancia y calidad. Su sede, ubicada en el número 9 de St James Street en Londres, ha sido calificada como «la tienda más bella del mundo» por la revista Esquire.