Una vez más, Demna Gvasalia y compañía, han vuelto a sacudir el mundo de la moda. Para su colección primavera/verano 2017, que por primera vez se ha presentado en París, la peculiar firma de moda Vetements, ha colaborado con hasta 18 firmas internacionales -y muy conocidas- como Levi’s, Reebok, Canada Goose, Comme des Garçons, Hanes, Juicy Couture, Manolo Blahnik, Brioni, Dr. Martens entre otros, que han contribuido con la firma parisina.

El concepto general de la moda de Vetements, como ya sabemos, gira alrededor del rediseño de piezas más bien tradicionales, transformando su estética clásica y modificando su estructura, corte y silueta para crear piezas que van más allá de los límites de las tendencias. Un ejemplo -y uno de los más controvertidos- fue la t-shirt con el logo de DHL, y su transformación de clásicos Levi’s.

Pero, ¿de dónde ha surgido la idea para dicha colaboración? Según el propio Gvasalia, después de producir los icónicos jeans en sus fábricas de Italia, la sensación que tenía después de fabricarlos era que no eran 100% auténticos. No eran 100% Levi’s.

Así que, con el objetivo de llegar a lo que para él era la situación ideal, contactó directamente con cada una de las marcas que se especializan en los productos que le interesaban al diseñador. Reebok para sneakers, Hanes para camisetas de algodón, Dr. Martens para calzado utilitario, Manolo Blanhik para tacones, y por supuesto Levi’s para continuar con sus míticos tejanos. Una vez realizada la producción, la distribución estaría a cargo de la propia firma creadora.

“La idea siempre fue tomar el producto más icónico, el más reconocido de la marca y ponerlo en el contexto ‘Vetements’, ya fuera en términos de forma o de construcción,“ dice Gvasalia acerca de las prendas que forman la colección.  

¿El resultado? Cuando se acercaron a Manolo Blanhik y le dijeron que básicamente iban a destruir sus zapatos, él dijo, “bueno, pues eso me encanta. Por favor, destruídlos”. Con Juiciy Couture, crearon vestidos de noche basados en sus famosísimos trajes de chándal en tonos pastel. Y en el caso de Brioni, además de pegar las piezas unas con otras en lugar del tradicional cosido a mano, eliminaron todo el proceso de planchado, resultando en una americana Brioni que, efectivamente parecía salida del imaginario de Vetements.

Para las firmas, según han reportado algunas ellas mismas, ha sido un reto, pero también una oportunidad para trabajar fuera de su zona de confort, situación que no pasa muy a menudo y que los trabajadores de las mismas han disfrutado plenamente. Una acción que ha redefinido por completo el concepto de “colaboración”. Pero, si hay algo en lo que Vetements es especialista, es justamente en transformar conceptos y romper esquemas.