Entrevista a Noelia, creadora de los «Mastectomy patches», Anna Bonny

Aventura: f. Empresa de resultado incierto o que presenta riesgos.

Así es como Noelia, creadora de la firma Anna Bonny y sus “mastectomy patches”, describe su experiencia. Y fue a raíz de esta aventura que nació Anna Bonny, un proyecto que busca el empoderamiento de la mujer, de aquellas que han pasado por una mastectomía y que buscan normalizar una situación que definitivamente, además de la vida, cambia la concepción y aceptación del propio cuerpo.

Con motivo de la semana contra la lucha contra el cáncer de mama, clientes y amigos se reunieron en nuestra terraza para disfrutar de un brunch y de la presentación de este revolucionario proyecto. Un proyecto que busca ofrecer una alternativa, no invasiva, a las soluciones médicas que normalmente se ofrecen a las mujeres que han pasado por esta situación.

Conociendo a Anna Bonny

Tuvimos la oportunidad de charlar con Noelia sobre la filosofía detrás de Anna Bonny y lo que hay detrás de este proyecto.

– SE: Anna Bonny es el nombre de tu firma pero también dices que es tu musa, ¿por qué escogiste este nombre para tu proyecto?

N: La analogía del mundo pirata aparece mucho antes del parche. Y era un poquito la visión que yo tenía del cáncer. Yo me daba cuenta que no me sentía identificada con todas las metáforas que se utilizaban “la guerra contra el cáncer”, “la lucha contra el cáncer”, Yo lo veía más como una aventura. Al final la vida está llena de aventuras, y si uno busca qué significa “aventura”, es un camino en el que hay riesgos y no se sabe el final. Entonces creo que es una metáfora muy válida para el cáncer. Me sentía más identificada con esta metáfora que con el concepto de “guerra”.

El origen de la idea del parche vino un día que vi una foto de Newton. Era Paloma Picasso con un parche en el ojo. Y ahí hice el click, y pensé, “claro, es esto”. De ahí surgió el parche, y cuando tuvimos que buscar un nombre, pensamos en un nombre de pirata, un poco para cerrar el círculo. Mujeres piratas hay muy poquitas, y Anna Bonny era muy rebelde, una mujer bisexual en pleno siglo XVII, una mujer cultivada que utilizaba su belleza y educación para la conquista. Y encajaba perfecto.

– SE: Hablando un poco de lo que hay detrás del producto, ¿qué es lo que quieres transmitir o compartir, cuál es la filosofía detrás de Anna Bonny?

N: Yo creo que es un producto muy mágico. Las mujeres que han pasado por un cáncer de mama o que han sufrido una mastectomía, creo que lo identificaron al momento. Es un producto que de una manera muy simple hace que tu cuerpo se transforme. Cuando yo enseño las fotos de Anna Bonny, nadie ve una mujer que ha tenido cáncer y que está mastectomizada. Hay muchas iniciativas que muestran las cicatrices, y son imágenes de mujeres muy valientes, pero al final siempre estás frente al cáncer. El parche es casi simbólico, pero con una prenda tan simple, ese cuerpo no está enfermo, no es un cuerpo invadido o mutilado. Para una mujer que cree que su cuerpo nunca va a ser más bonito, es un pequeño milagro. Creo que la maravilla de Anna Bonny es la sencillez.

– SE: ¿Crees que Anna Bonny pueda cambiar ese estigma social hacia las mujeres que han pasado por una mastectomía?

Yo creo que puede normalizarlo, pero me encantaría pensar que sí puede cambiarlo. Lo que creo es que si yo lo hubiese visto en el momento que me dicen que voy a perder el pecho, creo que la experiencia me hubiese parecido menos dura. Hubiese pensado “a lo mejor no es tan terrible” y no lo hubiese visto tan dramático.

– SE: En tu manifiesto dices que piensas mucho en la frase, “tu cuerpo es un campo de batalla” ¿por qué te ha inspirado tanto esta frase?

N: Es un poco por el trabajo de Barbara Kruger, artista de los 70s y que contribuyó muchísimo al empoderamiento de la mujer. Y yo la relaciono mucho con el proyecto porque me encantaría empoderar a la mujer, hacer que las mujeres dirijan su enfermedad, tomen sus decisiones, asuman sus responsabilidades, y creo que en una situación de diagnóstico de cáncer, olvidamos. Hay mucha presión hacia la reconstrucción, depositamos toda la confianza en manos de los médicos y creo que eso nos hace ir un poco más perdidas, y tener más miedo al no saber el camino o asumirlo. Y ahí sí me encantaría contribuir, me parece un mensaje importante.

– SE: ¿Qué futuro hay para Anna Bonny? ¿Tienes algún otro producto en mente?

Lo ideal sería que Anna Bonny dejara de existir y que no tuviera razón de ser. Eso sería la carta a los reyes magos, porque hemos avanzado, porque no hay mastectomías o hemos conseguido atajar la enfermedad de otros modos, eso sería idílico. Y a corto plazo, la verdad es que es muy bebé, acabamos de empezar y estamos un poco en la fase de divulgación. Sí que fantaseo con otras ideas, pero de momento está todo en la cabeza.

A partir de ahora, los «mastectomy patches» de Anna Bonny estarán disponibles en nuestra tienda de Paseo de Gracia, 93, siendo el primer -y hasta ahora único- punto físico de venta de la firma. Si quieres conocer más sobre este proyecto, en Santa Eulalia hemos dedicado un pequeño espacio pop-up en el que podrás descubrirlo de primera mano, y también puedes entrar en annabonny.com donde encontrarás todos los detalles.

Además, una parte de las ventas de los productos de Anna Bonny serán donados a Fundación Fero, fundación dedicada a la investigación oncológica.