Pionera del coleccionismo fotográfico en España y amante de la imagen, Lola Garrido se estrena como colaboradora en la decoración que durante esta temporada engalana nuestra tienda. “Yo creo que nací mirando” nos dice. Y nosotros no sólo lo creemos, sino que lo afirmamos, pues en su trabajo se refleja claramente su curiosidad, sensibilidad y como ella misma lo define, su interés por todo.
Este interés la ha llevado a aficionarse a crear unos pequeños pajaritos que se exhiben en diferentes áreas del interior de nuestra tienda. Pajaritus rosa amarilis, pajarus verdis, pajarus azulius o pajarus reflexivus son algunos de sus curiosos y divertidos nombres. Tela, papel, cartón incluso latas de latas de aluminio son los materiales que utiliza para crearlos.
Hemos tenido oportunidad de charlar con Lola Garrido quien nos confiesa el origen, inspiración y nos comparte un poco del momento que vive actualmente.
– ¿Cómo surge la idea de realizar estos pequeños pajaritos? ¿En qué se ha inspirado para hacerlos?
La idea surge porque soy una persona interesada en muchas cosas y tengo algunos problemas de salud por lo que al pasar muchas horas en casa la lectura y el trabajo con ordenadores afectaban considerablemente mi vista. Así que empecé a hacer un pajarito después de ver uno en un hotel de Berlín…
– El hecho de que sean aves y que cada una tenga un nombre diferente, ¿tiene algún significado especial?
Son juegos que hago que me divierten, se empieza haciendo uno por casualidad y se termina poniendo nombre a todos.
– ¿Cómo surge su amor por la imagen, por el arte?
Yo creo que nací mirando. Soy una observadora compulsiva, he aprendido parte de lo que sé con el cine y la fotografía es parte consustancial del siglo XX y XXI, decía Rodochenko que la persona que en esos siglos no sabe leer una imagen será un analfabeto visual. Hoy sin embargo, vemos demasiado, el mundo se compone de imágenes y el texto se ha olvidado.
– ¿Y cómo es que decide pasar del coleccionismo a probar con la creación?
Yo no lo llamaría creación sino interés por todo, un entretenimiento porque soy además, de las que piensa que todo lo que te ocupa si te divierte es un ocio impagable. Soy coleccionista porque se empieza y es imposible dejarlo, es una adicción que no tiene efectos secundarios, no siendo los económicos…Coleccionar es algo más serio, mi arte-sanía (así, separado porque me sana) es un divertimiento.
– Al haber trabajado tanto tiempo en el mundo del arte, ¿a quiénes considera como sus referentes estéticos?
Mis referentes estéticos son aquellos artistas que me llegan desde siempre, de la abstracción al minimalismo. Soy contemporánea sin remisión porque el que no vive su tiempo está perdiéndose su época.
– Según su opinión, ¿cuál diría que es la relación o el vínculo entre el mundo del arte y la moda?
El vínculo cada día es más fuerte. La gran moda es arte y marca tendencias, sus referentes casi siempre son artísticos y además ahora todos los grandes de la moda coleccionan y tienen sus propios museos. El dinero que mueve el mundo de la moda es tan fuerte que podemos gracias al interés artístico de las grandes firmas de moda ver lo mejor del arte contemporáneo en sus fundaciones. Prada para mí es el ejemplo más admirado. Su fundación con la arquitectura de Koolhas es un catálogo de belleza arquitectónica. Si el arte es inútil considerado en términos de economía su rentabilidad es inmensa en belleza e incluso como inversión.
Para terminar diré que soy de las personas que tengo interés por todo, y siempre he deseado tener mucho tiempo para perderlo, porque el tiempo que se pierde es el único que se gana. Ahora estoy jubilada que viene de júbilo, porque el tiempo por fin te pertenece.