La historia de Santa Eulalia empieza en 1843, cuando Josep Taberner, nacido en Guils de Cerdanya, abre una tienda de tejidos en la calle Boquería, en una Barcelona todavía amurallada.

En 1908, su nieto se asoció con mi bisabuelo Lorenzo, a quien después le sucedimos mi abuelo, mi padre y yo al frente del negocio. A lo largo de estos 180 años, Santa Eulalia ha vivido años de esplendor y periodos de tribulación y dificultad.

Las sucesivas generaciones que hemos estado al frente de la empresa no nos hemos sentido tanto propietarios como eslabones de una cadena destinada a perdurar. Las decisiones importantes han estado siempre orientadas a garantizar el futuro, aun a costa de sacrificios en el presente. Hemos sentido la necesidad de legar a nuestros hijos lo que recibimos de nuestros padres.

Mi abuelo Luis, quien en 1926 fue pionero en Barcelona en importar de París los desfiles de moda como manera de mostrar las colecciones, tuvo siempre las ideas claras.

Sabía que lograr satisfacer a una clientela exigente era la mejor manera de triunfar.

Desde entonces, en Santa Eulalia, atender de la mejor manera posible a nuestros clientes y amigos es nuestra razón de ser, y recorremos las capitales de la moda para ofrecerles lo mejor del panorama internacional.

De mi padre aprendí el valor del esfuerzo, de la importancia de respetar la palabra dada y de obrar de forma recta. Me enseñó que el mayor activo de una empresa son las personas que la integran y que nuestra obligación es dirigirlas bien. Cuando falleció, me puse al frente del negocio con 22 años. Fueron años de dificultades, pero los consejos de mi abuelo, quien viviría dos años más, y el apoyo de los profesionales de la casa me ayudaron a sortearlas.

Junto a mi mujer, Sandra, fuimos viendo claro que, si queríamos seguir siendo referentes en el mundo de la moda, teníamos que transformar la empresa, por entonces centrada en la sastrería y en las colecciones propias de alta costura. Había que abrirse a las propuestas de los grandes diseñadores internacionales, sin perder nuestros valores de excelencia en el servicio y manteniendo la profesionalidad de nuestros talleres.

Hoy, Santa Eulalia es un referente en el panorama europeo de la moda, ofreciendo las colecciones de los mejores diseñadores, tanto consagrados como emergentes, a la par de ser una de las pocas casas de nuestro país que mantiene una sastrería y camisería artesanal a medida. Y, en un mundo cada vez más dominado por las grandes multinacionales, nos esforzamos en seguir hablando con voz propia y en poner nuestro grano de arena para que Barcelona ofrezca su mejor cara a través de una de sus tiendas más genuinas.

Artículo de Luis Sans, presidente de Santa Eulalia 

Extraído del libro Santa Eulalia 180 Años de Moda a la venta en nuestra web